domingo, junio 19, 2016

hace mucho.

hace mucho que no sudan las manos
ni en los silencios se oyen jaurías
ni en las noches la luna sueña
hace mucho que los puños
no se enredan en estas teclas
para dejar el amargo y dulce sabor
de las palabras
y que se regodeen de saberse lectores
sonámbulos de un silencio, de unas manos y
de una luna sin sueños ni sol.