Di, tú
Que del silencio, no hay nada
sólo escombros que amontono en el papel.
Di, tú
Que el escándalo de las palabras
combaten una a una por resistir
su presencia en estas páginas dormidas.
A ti
(a quién si no)
No estabas
a las puertas del juicio final
por qué,
es casi seguro,
los ángeles se fueron contigo.
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En este poema, el silencio marca una distancia infinita...
ResponderEliminarUn abrazo
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminargracias ana, y pensar que se oye el silencio, a veces.
ResponderEliminarbezarkada bat.
Si José Lezama, este genial cubano, hubiera leìdo tus versos, te habrìa dicho, sin duda, sigue escribiendo, que tus letras son hermosas. Abrazos.
ResponderEliminareS LiNDo VeR aLoS áNGeLeS, CuaNDo Se aCeRCaN, PeRo DiMe, Si LoS áNGeLeS Se FueRoN CONmiGo, ¿CóMo eS Que Tu No eSTaBaS eNTRe eLLoS?
ResponderEliminarNo sé si recibiste mi anterior comentario, por si acaso te vuelvo a saludar.
ResponderEliminarPor eso hay silencio, porque se fue con los ángeles...
ResponderEliminarNunca dejarás de sorprenderme. ^_^
Besotesssssssssssssssssss
lindo tx
ResponderEliminar:-)
el silencio no desaparece ni ante combates de palabras ni ante intentos por obviarlo... solo se va si llegan las palabras que queremos escuchar... lo demás, por más intentos... será solo ruido que poco podrá distraer ese vacio...
ResponderEliminarbesos...!
A veces es mucho más escandaloso el silencio. Atruena hasta volver loco..
ResponderEliminarbesos.
si, puede que sí, pero también es posible que en el último momento haya logrado ver tu rostro bajo el arco caído y la ceniza y me hayan convertido en estatua de sal
ResponderEliminarbesitos
Nati
breve y gigante...
ResponderEliminarUn abrazo Gus.
http://poemasdegustavotisocco.blogspot.com