miércoles, diciembre 03, 2008

epístolas primera

Ha concluido esta vez
la serpiente en mis manos
que debería de seguir
el camino de los proscritos.
También dice
que debo de apuntar mejor
mis versos hacia
el lado más tierno y áspero
de la denuncia.
De momento, todo sigue igual
menos el frío
que hiela mis manos
y las piernas
mientras veo marcharse
como vino a la serpiente
cubierta de plumas sus axilas.

2 comentarios:

  1. tus versos son siempre denuncia,
    y tus versos son la fuente de calor que destruirá el frío que hiela tus manos y tus piernas,
    fuerza y besos siempre, contá conmigo siempre...

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  2. Que los recuerdos sirvan para que no vuelvan.
    Que el dolor se hiele, que no alimentemos el odio y si sembremos amor. Saber lo que no queremos que vuelva a suceder, que no suceda....
    Besos y amor.
    je

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