He estado a punto
de olvidar el zigzagueo que
tienen tus caderas cuando andas
por las esquinas de mis dedos.
He estado a punto
de ignorar tus besos de las mañanas
y de dejar que palpite mi cintura
a la orilla de tus caderas.
He visto amaneceres, muchos
y no he podido ni tan siquiera
arrebatar a tu mirada una sonrisa.
He acariciado tantas lunas
y ninguna tenía la mirada
que tienen tus labios, sobre todo
cuando miran hacia la derecha.
lunes, abril 12, 2010
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siempre me gusta esta forma tuya donde siempre exaltas esa permanencia, incluso o tal vez desde la ausencia, me ha encantado la sensualidad de las dos primeras estrofas,( como que la piel dice"uys" si es que la piel dice..también ese intento de arrebatar una sonrisa a su mirada, así como esa comparación sublime de tus lunas y poner miradas en los labios, me gusta sí, me gusta mucho. Es un hermoso poema de amor.
ResponderEliminarUn saludo
Precioso poema, Txanba, muy dulce, maravillosas analogías alocadas.
ResponderEliminarCariños!
Esa mirada debe sonreír al leer tus letras
ResponderEliminarNo olvides lo importante, lo demás déjalo que se marche, un beso