El día transcurrió frío
sí, frío, y me dormí leyendo un libro de número,
¿alguien ha leído un libro de números?
escribí entre paredes, números
y me fue imposible construir paredes.
Las matemáticas siempre fueron
mis enemigas, pero me acarició más de alguna
ecuación de segundo grado y otras tanto
pero, hacer un ladrillo y
dibujar edificios no va conmigo.
No sé si la poesía es parecido a leer número
no lo sé, ¿alguien ha leído un libro de número?
describir número, hacer números construir números...
Este día me perdí leyendo a Pitagoras
la verdad es que preferí, por momentos,
a Roque Dalton, o a mi mismo
diciendo barbaridades literarias en vez de números
son hermosos los número, los edificios
y alguna fórmula que me haga entender
de qué estamos hechos, por los menos,
el ser humano,
ese que hace y construye edificios
en cualquier parte de esta planeta llamado tierra.
viernes, septiembre 18, 2009
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Los números no son lo mío, aunque reconozco que tienen algo misterioso que acaba llevándonos siempre a ellos.
ResponderEliminarBuena entrada. Mil besitos!!!
Yo vivo de los números, mi amigo, son más fieles que las palabras
ResponderEliminarMe encanta cómo escribes
un abrazo
¿El día fue frío? ¿habrán sido los números? ¿hará falta la caricia de la metáfora? ¿la tibieza de la sonrisa? ¿el calor de un sol, inca, maya, mapuche o simplemente sol pero en femenino?
ResponderEliminarQuiero que este día de hoy sea menos frío, que tengas tu metáfora de sol y que leas algún libro con menos números...
Besos Txanba,
ni uno, ni dos, ningún número de besos...
todos, para que el frío de los números se transforme en el calor de las palabras y del todo que somos...
chaucito