miércoles, junio 16, 2010

Qué puedo pedirte yo

canción

Qué puedo pedirte yo si yo nunca te di nada
si sólo te di mi sombra cuando te hallabas cansada
si sólo te dí mi voz cuando valor te faltaba
y aunque sabías de mi amor yo nunca te lo gritaba.

Si sólo firmé poemas no un acta de matrimonio
si vos sabés mi secreto pero no si duermo solo
por eso mi canto es tuyo y son míos tus recuerdos
te regalo mi alegría y me llevo tu silencio.


25-o3-1o

Qué me queda

"mis ojos encontraron en un rincón los tuyos
se descubrieron mudo entre las dos miradas."
miguel hernández

Qué me queda por recorrer,
el camino que lleve a roma para
perderme en cualquier calle
clandestina que me invite al amor.

Qué me queda por decir
si ya todo o casi todo te he dicho
no encuentro ya no encuentro ni tu sonrisa
en las únicas fotos que de tuyas, tengo.

Qué me queda por descubrir si
con tus ojos cabizbajos no soy capaz
de descifrar con mis ojos
la verdad que en tu pecho anida.

Qué puedo pedirte yo
si mis ojos no son más
que dos gárgolas
que buscan los tuyos.

el extremista

Qué lucesita misteriosa
hace a estas horas de la noche
del día y de la semana, que
siga pensando en que es posible
que me dediques un verso, una palabra
o para ser más extremista, un beso

martes, junio 15, 2010

El pájaro y su trino

Busco en los árboles
aquél viejo y veloz quetzal
que late las plumas al oír
tu nombre en esa selva extranjera
él canta y su trino
que no parece oírse
se aleja como vociferando al viento
de lo que no soy capaz
de entender cuando
él canta y en su trino,
dice susurrando tu nombre.

25-o3-2o1o

el pájaro cantor

desnudo las cicatrices
de un pájaro cantor
y busco desesperado
algún atisbo de amor
que guarda en su trino
cuando al cantar tu nombre
lo dice al revés y con malicia


vitoria. 25-o3-1o

domingo, junio 13, 2010

fuera de lugar

"que sólo el sol de agosto logra hacer corazones."
miguel hernández


Estoy casi fuera de lugar
estoy fuera de las fauces del imperio
y casi a menudo me cobijo solícito
en algo parecido al amor.

I

Es más fácil buscar tu nombre
buscar tu cara, buscarte a ti
para regocijarme de que a pesar
que el mal parece inundar las
pasarelas de este mundo.

Tú, sí, tú, le das sentido a la vida
en este mundo que se me arrodilla
ante mí como cual fantasma loco
de una contienda que ellos, el imperio,
inventa y me hace sentir
casi fuera de lugar...
pero estas tú ahí,
no sabes que te observo
y así en la distancia
me das fuerza para creer
en algo precioso que tiene,
a pesar de todo, la vida.


II

Quiero escribir sortilegios a tu nombre,
quiero rezar cada verso
que escriba al lado de tu cintura
Quiero resarcir mi osadía
pálida y casi ecléctica
cuando un día de aquellos
dejé tu nombre escrito sin tu permiso,
si hay algo que pueda hacer
para borrar tal osadía,
sólo dime, y, mis sortilegios harán lo demás.

III

Cada sabor que pruebo
cada beso que aviento al sol
me recuerda tu imagen
tosca y cansina
de cuando los rayos del dios Inti
acariciaban tus leves canas
en aquellas montañas perdidas por el Sur
y dejaban en tus piernas locas cicatrices
cuando el surco aquél te echo una zancadilla.

IV

Mas vale escribir versos
que ponerme de rodillas al Sol
o al invento invertebrado de una máquina
parecida a la rutina en estas
cuatro paredes que hoy empiezan
a exorcizarme con tu nombre.


V


Que el sol de este verano
nos haga sentir lo loco que esta
este laberinto que los humanos
han creado en lo que ellos llaman tierra.
Sortilegios, necesito, para sanar
la loca compostura que me hace sentir
este agosto que no llega
y que encienda en el corazón
de cristal que poseo
cuando tú no me das ni un verso.

viernes, junio 11, 2010

compartiendo historias

Es una historia que he encontrado leyendo, como siempre, a Leonardo Boff. Transcribo sólo la historia, merece la pena leerla, y sobre todo compartirla.

Tal vez una historia de los maestros espirituales antiguos nos aclare el sentido de esta pérdida que se transforma en ganancia.

«Había una vez un muñeco de sal. Después de peregrinar por tierras áridas llegó a descubrir el mar que nunca antes había visto y por eso no conseguía comprenderlo. El muñeco de sal le preguntó: «¿Tú quien eres?» Y el mar le respondió: «Soy el mar». El muñeco de sal volvió preguntar: «¿Pero qué es el mar?» Y el mar contesto: «Soy yo». «No entiendo», dijo el muñeco de sal, «pero me gustaría mucho entenderte. ¿Qué puedo hacer?» El mar simplemente le dijo: «Tócame». Entonces el muñeco de sal, tímidamente, tocó el mar con la punta de los dedos del pie y notó que aquello empezaba a ser comprensible, pero luego se dio cuenta de que habían desaparecido las puntas de los pies. «¡Uy, mar, mira lo que me hiciste!» Y el mar le respondió: «Tú me diste algo de ti y yo te di comprensión. Tienes que darte todo para comprenderme todo». Y el muñeco de sal comenzó a entrar lentamente mar adentro, despacio y solemne, como quien va a hacer la cosa más importante de su vida. A medida que iba entrando, iba también diluyéndose y comprendiendo cada vez más al mar. El muñeco de sal seguía preguntando: «Qué es el mar?». Hasta que una ola lo cubrió por entero. En el ultimo momento, antes de diluirse en el mar, todavía pudo decir: «Soy yo».

Se desapegó de todo y ganó todo: el verdadero yo.

jueves, junio 10, 2010

dibujando un croquis

Quiero delinear con mis dedos
un croquis, un mapa...
ir despacio zigzagueando
con un susurro en tu piel
para que derrita la sencillez
que tienen tus labios
cuando me besas despacio
en mis lágrimas que
disimulan lo que siente
mi cuerpo cuando
imaginamos estar juntos.

miércoles, junio 09, 2010

manos con versos

Tengo en mis manos
unos versos que se cultivan
su latir es rápido y fecundo
como tus labios de rotundos
que palpitan y me cautivan
aún a pesar de los humanos.

manos sin versos

Venid locomotoras
arruinarme el alma
penetrar mis oídos
y colgad mis manos
en cualquier poste
que dé a la esquina
de una madriguera.

otra vez

"cada vez más amargo"
miguel hernández


Aquí está otra vez
la extraña sensación de la perfidia
no atisbo a comprender
porque el dedicarte un poema
me he convertirme casi en un leproso pervertido.

Sólo sé que fui sincero
así como las bestias se visten de colores
yo sólo recuerdo una cana en tu pelo
pero no importa... desde entonces
no la he vuelto a ver.

Aquí está otra vez
esa extraña sensación de sentirme maldito
sí, maldito por decir una vez
tu nombre aunque casi me arrepiento
porque desde entonces
sólo espero que me tumben al sol
las caracolas que aúllan esperando
a que el sol me queme la cara
un día de estos en la playa.

Si te escribí un poema
maldito sea, si te lo dedique
maldito sean mis versos y quien lo escribe,
prefiero mil veces seguir siendo
un amigo ajeno y viejo
a ser uno que endilga tu perfidia
sólo por sentir la sinceridad
dentro de mi maldito pecho
desde entonces...
esos versos se están convirtiendo
en una bebida "cada vez más amarga"
a medida que pasa el tiempo y me lastima
lo siento, era un poema para ti.


25-03-2010

martes, junio 08, 2010

Cara con gafas

Tengo los rizos de un hipopótamo
me mira como queriendo adivinar
que en mi cara se encuentra algún lunar
que sólo yo... sé dónde está
y que nadie más se atreve a decirme
porque las gafas que tengo
impiden que por esa mancha
sea el hazme reír del hipopótamo y sus vecinos
en esta pequeña charca de esta ciudad
en la que habito por obra y gracia del imperialismo

Cara sin gafas

No me atrevo a desfigurarme la cara
porque de nada me serviría si
antepongo tus ojos, que azules,
me invaden en este cielo
que cobija mi cuerpo
con la cara intacta y sin gafas.

Estigma: depredador.

Como un aguacero inerte
yace en mis manos
el sonido de tus labios
que recorren veloz
los únicos átomos oscuros
que tengo en un altar
de una soledad inhóspita
que requiere de una ayuda
artificial pero generosa
para resarcir, quizá,
ese estigma de depredador
que tengo por dedicarte
un día de un mes de un año
un verso y un poema.

lunes, junio 07, 2010

Espantapájaros

Harapos cubren mi rostro
cándidos ojos que no llegan
a ver la sensación negativa
que encierran tus miradas.

Tiznaré mi escondite para
que nadie, absolutamente, nadie
diga que no lo ha visto
y ahí estaré esperando a
que de las hierbas salga una mariposa.

Lo primero que hiciste fue hablarme
lo segundo seguir hablándome
y lo tercero que hiciste
es hacerme sentir atroz, lívido
como un espantapájaros que acosa
más todo fue momentáneo
mi sinceridad no se preveía cierta
desde entonces, guardo silencio.

Pero la cicatriz ya no cierra
permanece abierta como una
alharaca a los cuatro vientos
no digo nada, ya no te he escrito
un verso, ni un poema
donde se atisbe algún hálito
que te acaricia por lo menos tu nombre.


Harapos que guardo en mi cara
son sólo la cruel efigie de mi pasado.

o6-abril-2010

jueves, junio 03, 2010

Si supieras

"Liminar el cantar, la pluma ausente
trajo del cazador a la presencia
demostrando en tu pico tu existencia"
miguel hernández



¡Ah! si supieras lo cruel
que me resulta el verso
se me enreda en mis sauces y
no logro arrancarle hasta
pasado el tiempo en el papel

¡Ah! si supieras lo vil
que me parece el ciervo
cuando se acerca temblando
a la orilla del río
mientras alguien le espera
para robarle la piel en un segundo.

¡Ah! si supieras lo ajeno
que me resulta a veces
tener tus pechos en mis labios
y no poder sentir ni un átomo
tuyo en mis pupilas
que se crecen a la orilla de tu
sempiterno pubis.

¡Ah! si supieras lo hermoso
que parece a veces
imaginar tu despropósito
ignorando mis palabras
las que te escribí hace
un tiempo en este mismo espacio
y que vengas tú y no me digas
ni una coma ni un punto final.

¡Ah! si supieras lo que inundo
al observar al pájaro campana
derribar los árboles donde
se aposenta su abvesario oropendola
con tal de no compartir
ni tan siquiera una rama
una charca o un vuelo en el
que dejar, al caso, las alas.

Hay Sol, Mucho Sol en estos días.

Estos día hay Sol, mucho Sol. También hay color, mucho color. La gente, alguna gente, empieza a salir a la playa, a los parques para que el sol y los colores les acaricien las piel. Hay agua, mucha, es el mar. La playa parece más un hormiguero desde este punta del monte. En el parque los niños juegan, sus madres le observan jugar.

Se ve que hay Sol, mucho Sol. En el mediterráneo los soldados israelíes han asesinado a más de 19 pacifistas que llevaban ayuda humanitaria a Gaza a los palestinos que, ellos mismos, los israelíes - y el gobierno - han castigado por creer en la democracia, por ejercer la democracia y elegir a un partido político que la gente de Gaza - y Palestina -quieren que les gobierne. A los israelíes, sin embargo, no. Les han impuesto un férreo cerco militar en toda regla, algunos dicen que es la cárcel más grande del mundo. El Barco se llama Libertad. Sí, Libertad y fue asaltado matando a los pacifistas.

Estos días hay Sol, mucho Sol. La vida continúa aquí en la tierra, en nuestras ciudades las gentes van a la playa a tomar el sol o a los parques a tomar el Sol... pero eso se hace aquí en el Norte que se dice Rico. Hay Sol, en estos días hay mucho Sol. Y en el mediterráneo hace Sol, mucho Sol. Sin embargo, también, hay muertos en el Barco que llevaba ayuda humanitaria a Gaza. Hay Sol, en estos días hay mucho Sol.

martes, junio 01, 2010

anónimo

Así, con mis palabras
sabrás que nocturneo
por tu bitácora.

Sé que mi nombre es a veces
lívido e intransigente
con la monotonía que suelen
arribar en los versos
cuando uno menos se lo espera.

Pero tú sabrás que soy yo
porque a veces dejo
mi huella en la puerta
o dejo, si es la ocasión,
algunos estambres y pistilos
de rosas azules
que te llevo y se quedan
justo en la ventana que da
en la parte de abajo de tu casa.