Solícito me acerco a ti
para aumentar la catarsis
entre tus palabras y las mías
entre tus manos y las mías
entre tus labios y los míos.
Mi solicitud a caído en manos vacías
no existe ni el trémolo de una caricia
para que me sienta atado a ti
aunque sea con unas palabras.
Me enredo entre el entusiasmo y la espera
entre el sí y el no de tu presencia
entre ese silencio absurdo y la palabra
que diga el sí, aunque sea en voz bajita
tímida como la piel que muestra tu sonrisa
en el reino del imperio del dios Inti.
De nada sirven las mariposas
si vuelan a mi alrededor y no estás tú
acariciando cada vuelo sensato de la
que tienes en tus manos.
lunes, diciembre 21, 2009
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Precios solicitud, un encanto de poema.
ResponderEliminarCariños!
a veces o muchas veces, el amor es esquivo, ni modo hay que insistir.
ResponderEliminarun abrazo
Tal vez no echar solicitudes, no esperar nada, no sentirse atada, simplemente sentir lo que uno siente sin pensar en lo que el otro espera o no, sea el amor. No se.
ResponderEliminarBesos y amor
je