Siempre me doy cuenta que me equivoco cuando estoy solo.
Tengo una vela en mi habitación, que me alumbra. Cuando ella quiere.
Todos seguimos siendo todos, cuando nos damos cuenta que realmente somos el todo.
Lloramos y al terminar nos damos cuenta que hemos llorado.
Reímos y al terminar nos damos cuenta que valió la pena.
Esta mañana me viste de mujer pero nadie me creyó. Se me olvidó, cortarme la barba.
miércoles, mayo 23, 2007
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Siempre soy la mujer solitaria que regresa y siempre acaba tejiendo tormentos.
ResponderEliminarUn fortísimo abrazo
Gracias por tu visita... me encanta Silvio y tus letras.... interesante saber que tenemos una vela, que el respiro sirve para saber que vivo o para llorar o reir al final querer ser algo y olvidarse de las bondades de la naturaleza que nos permiten ser nosotros mismos y no pelearnos y olvidarnos de lo que realmente amamos...
ResponderEliminarinteresante tu blog... lo estuve disfrutando un poco, quiero regresar a leer mas de ti.
Besos,
Aire
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gracias a vos, yo también leo los tuyos. un beso.
ResponderEliminarHola txanba, estuve curioseando un poquito en tu espacio y me parecio mucho muy interesante. Cuanta razón tienes nosotros somos, y sobre la luz, ella te alumbra siempre, solo tienes que dejarla brillar.
ResponderEliminarUn abrazo,
Gigi
Estando sola me doy cuenta cuanto me he equivocado.
ResponderEliminarEstando sola me equivoco y siempre me doy cuenta:)
Siempre lloro y tengo plena conciencia de mi llanto, odio llorar màs de una vez alguna cosa.
Besos, Txanba
un abrazo. gracias por dejar un mensajito.
ResponderEliminarMe ha encantado este post, tiene magia...besos
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