jueves, junio 21, 2007

Tenía que escribirlo.



Han venido a mi
los angustiosos
finales de un inocente.
Es cínicamente
irreverente
hay dolor, angustia,
silencio, dolor, tortura.
y un aliento que se queda
en el recuerdo de sus hijas
que le dicen adiós
mientras se muere.

Tenía que escribirlo.

3 comentarios:

  1. Anónimo2:57 p. m.

    silencio, dolor, tortura.
    y un aliento que se queda



    me mataste con eso, seguro me lo robaría para escribir algo con esas dos líneas...

    ResponderEliminar
  2. Entiendo que tuvieras que escribirlo... Es la única manera de calmar el dolor que inunda la memoria cuando a ella acude un recuerdo así.

    Besos, Txanba. Y si de verdad hay un hecho real de trasfondo, como imagino, lo siento...

    ResponderEliminar
  3. No sé qué decir.... Pero me alegro de que lo escribieras.

    Es precioso cielo.

    Besotessssssssss

    ResponderEliminar